La violencia jamás resuelve los conflictos, ni siquiera disminuye sus consecuencias dramáticas.
Juan Pablo II
Se llegó el día en que Enrique Peña Nieto tomara Protesta en la Cámara de Diputados como Presidente de México y las Manifestaciones dentro y fuera de San Lázaro no se hicieron esperar.
Ya el Estado Mayor Presidencial había cercado días antes calles, cerrado el paso vehicular y peatonal, y canceló varias estaciones del Metro para evitar la mayor cantidad de desmanes cerca del Recinto.
La realidad al final muchos no la esperábamos...
Miles de personas encapuchadas con el legitimo derecho a manifestarse y protestar se posicionaron cerca de San Lázaro y empezaron a atacar a los Granaderos del DF, Policía Federal y demás autoridades que estaban resguardando las vallas de protección.
La autoridad se defendió usando gases lacrimógenos y disparó balas de goma a los manifestantes para tratar de dispersarlos siendo todo esto inútil Las batallas se hicieron cada vez mas violentas, los manifestantes utilizaron piedras, palos, bombas molotov, rociaron de gasolina a policías y destruían lo que estuviera a su paso. Los medios de comunicación se encargaron de llevar las imágenes casi en tiempo real mostrándonos la lucha campal que se llevaba a cabo en las inmediaciones del recinto Legislativo.
Pasó el tiempo y los rijosos aparecieron en distintos puntos de la ciudad de México. Comenzaron a destruir negocios, automóviles, saquearon tiendas y pintaban con graffiti las paredes. La autoridad en algunos casos detuvo a algunos manifestantes y los que eran detenidos se proclamaban como Anarquistas, sin comentar quienes los habían mandado a protestar y financiado los recursos que usaron para protestar.
Hasta ahí un poco del como sucedieron las cosas en la vía pública.
Así como se libró una batalla campal en las calles, en las redes sociales sucedía lo mismo. Hubo comunicadores, políticos directores de TV, ciudadanos, etc, que apoyaban las manifestaciones violentas y se quejaban del uso de la fuerza del gobierno para defenderse, llamándolos Represores.
En este espacio, siempre hemos estado a favor y creído en la libertad de expresión. La libertad de expresión es un derecho universal que nadie nos puede cuartar. En este escenario del 1 de diciembre, nadie la cuartó, al contrario existieron distintos puntos en donde se manifestó esto.
- Dentro de la Cámara de Diputados los diputados del PT y Movimiento Ciudadano mostraron pancartas y gritaron consignas contra Enrique Peña Nieto.
- Andrés Manuel López Obrador se manifestó en el Ángel de la Independencia y dijo todo lo que tenía que decir sin que fuera callado por nadie.
- El Movimiento #YoSoy132 se manifestó en distintos puntos de la ciudad sin que tuvieran algún problema y se deslindaron de los grupos violentos que atacaban los comercios.
Sin embargo los grupos de choque que atacaron con premeditación a las fuerzas policiales con las armas antes mencionadas se quejaban de ser reprimidos con la misma fuerza que utilizaron ellos. Es interesante como estas personas piden no ser atacadas cuando ellos son los que empiezan con los desmanes. No se que tiene que ver el destruir los comercios, bancos, autos de terceros, para Protestar contra la Imposición de Enrique Peña Nieto. ¿Que culpa tienen los ciudadanos comunes y corrientes de ser agredidos en sus propiedades? Los derechos de una persona terminan donde empiezan los de la otra persona y a estos grupos violentos y algunos ciudadanos no les ha quedado claro.
Estos grupos sienten que tienen todo el derecho de agredir sin ser molestados y de serlo así, llaman al Gobierno Local o Federal: "Fascista". Cada vez noto que el país esta polarizado y existen corrientes muy radicales. El mismo hecho de ser radical puede ser peligroso, porque nunca se mantienen limites.
El rociar de gasolina a un policía que hace su trabajo nunca estará justificado, aún y cuando tengamos la razón de lo que protestamos. Así como el Policía no tiene el derecho de golpear a un manifestante solo por expresar sus ideas.
Ya basta de Radicalismos, debemos de unirnos como Sociedad, expresarnos, manifestarnos pero siempre dentro del Marco de la Ley. No podemos exigir Justicia, si nosotros como sociedad la incitamos y la justificamos cuando nos conviene. Para ser un mejor país debemos de ser mejores personas y la Violencia no nos llevará a serlo.
Existirán siempre personas (muchas o pocas) que pensarán que Enrique Peña Nieto compró la Presidencia, que compró mas de 5 millones de votos y estas personas están en su derecho de expresarlo y manifestarlo cuantas veces lo crean necesario, pero lo que no tienen permitido es destruir la Propiedad Pública, Privada e incitar a la Violencia. Eso jamás estará Justificado.
